Las mejores termas cerca de Santiago de Chile

Chile es territorio de volcanes, por tanto, hay un gran número de aguas termales y balnearios en todo el país, más de 250 a lo ancho y largo de la superficie nacional.

Para los que buscan un viaje relajante y disfrutan de las experiencias transformadoras, las termas son la mejor opción. Tienen la oportunidad de desconectarse del mundo y de disfrutar de los maravillosos paisajes que los rodean.

Además, las altas temperaturas del agua, que alcanzan hasta los 40°, traen muchos beneficios a tu cuerpo. Te ayudan a estimular la circulación de la sangre y el sistema inmunológico, rejuvenecen tu piel, controlan la presión arterial y la relajación genera endorfinas de manera natural.

Si quieres experimentar todos sus beneficios, pero no deseas alejarte de la capital, a continuación, encontrarás las mejores opciones de termas cercanas a Santiago.

Las mejores termas cerca de Santiago

Termas de Jahuel

Situado en el Valle de Aconcagua, las termas de Jahuel son uno de los centros termales más famosos cerca de la capital, y tiene más de cien años de historia. Cuentan con una infraestructura moderna y espacios de lujo, dentro de sus instalaciones encuentras restaurantes, gimnasio y hasta cancha de tenis.

Se encuentra a 85 kilómetros de Santiago, y existen distintas tarifas que se ajustan a tu presupuesto, desde habitaciones sencillas hasta cuartos de lujo con vistas al valle. Una vez allí puedes elegir entre las piscinas techadas y al aire libre, y después acercarse al spa, donde hay una variedad de masajes disponibles.

Incluso, si quieres aventurarte un poco, puedes realizar más actividades cerca del recinto, como senderismo, bicicleta de montaña y cabalgatas. (Ver más)

Termas de Colina

Es el centro termal más cercano, a apenas 40 kilómetros de la capital. Es un recinto militar con puertas abiertas al público. Su equipamiento, aunque sencillo, es confortable y acogedor, y tienen acceso a hoteles, cabañas, canchas y restaurantes.

En cuanto a sus instalaciones termales, comprenden piscinas al aire libre, tinas termales individuales, saunas y jacuzzi.

Termas del Corazón

Este es otro recinto de gran trayectoria, que se ubica en mitad de los paisajes precordilleranos de San Esteban. Cuenta con restaurante, salones de fiesta y distintas áreas recreativas, además, su programa de actividades cambia diariamente, lo que mantiene dinámica tu estancia en sus establecimientos.

Sus instalaciones termales van desde piscinas interiores y exteriores, sauna, jacuzzi y hasta pabellón termal, para que elijas la opción de tu preferencia. Puedes acceder a este recinto contratando una habitación singular o incluso un apartamento con dos niveles para una experiencia familiar. Y todo esto solo a 87 kilómetros de Santiago de Chile.

Termas del Plomo

La gran característica de estas termas es que son un entorno natural, no cuentan con ningún tipo de infraestructura, y se localizan a 100 kilómetros de la capital. Allí, el agua se acumula en pozos naturales y hay espacios en los que se puede acampar.

Sus bellos paisajes la convierten en una opción imperdible, y están hechas para los que buscan algo más de aventura y conexión con la naturaleza. Su camino es difícil y requiere de mucho esfuerzo llegar allá, pero vale la pena encontrarse en hermosos paisajes precordilleranos con el volcán San José de fondo, tal y cómo lo indican los usuarios de TripAdvisor.

Termas de Catillo

Se encuentran cercanas a la comunidad de Parral, entre los paisajes de Catillo. Su recinto es sencillo, pero con acceso a restaurantes, salones recreativos, y caminos para realizar senderismo, lo que la convierte en una opción confortable.

Tiene a disposición distintos tipos de habitaciones que se ajustan a tu presupuesto, y sus instalaciones termales se dividen en piscinas techadas, tinas individuales, piscinas con hidromasajes, duchas escocesas, sauna y salas de masoterapia. Aunque tendrás que andar un poco más para visitarlas, pues están a 365 kilómetros de Santiago.

Termas de Panimávida

Localizadas en las medianías de Linares, a 320 kilómetros de la capital del país. Cuenta con hermosos jardines que acompañan las vistas a la montaña, así como con un estilo colonial y elegante.

Tiene un bar, restaurante y varios salones de recreación a disposición de sus usuarios. Sus hospedajes van desde habitaciones sencillas, hasta suites y departamentos, siempre acompañados de motivos rurales que amenizan la estancia. Cuenta con piscinas techadas y al aire libre, así como con un centro de estética y un área dedicada a la terapia con masajes.